Boda de verano, boda de girasoles

Si tenemos que elegir las flores típicas del verano, no pueden faltar en la lista los girasoles. Esta es la época del año -finales de julio- en la que florecen y como su propio nombre indica, apuntan hacia el sol. Seguro que todas conocéis esta flor que puede llegar a medir dos metros de altura, pero es difícil imaginársela en la decoración de una boda ¿no? ¡Pues no! 

Los girasoles son una flor alegre, llena de vitalidad y sobre todo de color, una flor que puede llenar de vida cualquier lugar sombrío. Y qué mejor que una boda para llenarla de alegría.

Si sois de las que también os gustan los girasoles y queréis alguna idea que os inspire para vuestra celebración, aquí os dejo varias opciones y varios consejos (subjetivos) que debéis tener en cuenta. Lo que sí y lo que no

Ramo de novia con girasoles.

Como ya sabéis se trata de una flor grande y tremendamente llamativa. Sólo si lleváis un vestido muy sencillo que queráis realzar con un elemento que llame la atención debéis usarlos en el ramo. Si no, lo único que conseguiréis que sea el centro de las miradas y desmerezca el vestido, y si éste es recargado o ya de por sí tiene detalles podéis crear un "cóctel molotov". Por la misma razón es mejor no mezclar esta flor con otras de colores vivos, mejor hacerla con otras sencillas como la paniculata u hojas verdes. O mejor aún: lleva un único girasol.

En la decoración

Lo poco agrada y lo mucho cansa. Y más si el color es el amarillo. Los girasoles son perfectos para pequeños detalles, pero llenar el banquete de girasoles nos parece too much. No nos gustan los girasoles en composiciones perfectas, porque parecen totalmente artificiales. Como decíamos antes, los girasoles tienen vida propia y no podemos quitársela a la fuerza.

Una cosa es incluir los girasoles en tu boda y otra muy distinta convertirlos en la temática, convirtiendo cada rincón del banquete en un santuario de girasoles, incluso la tarta de la boda. Por mucho que nos gusten los girasoles hay sitios donde simplemente no, no y no.

Los girasoles son flores de campo, totalmente rústicas y campestres. Por eso quedan mucho mejor al aire libre que en sitios cerrados. También le van muchísimo mejor elementos rústicos y desenfadados como balas de paja, cubos de metal, tarros de cristal, etc. Estas tres opciones nos encantan

Recordad que para cualquier cosa en la vida, el exceso no es bueno.

Si queréis ver más ideas con otras flores podéis hacerlo aquí. Y estáis buscando inspiración con otras flores, plantas o temática no dudéis en pedirnos consejo

Fotos: Pinterest, Etsy