Mi boda: Primera parte

Parece que fue ayer pero ya han pasado tres años...tres! Y una preciosa niña en común: Martina

Hoy me he dado cuenta de que después de unos meses escribiendo sobre todo tipo de eventos, contando experiencias, transmitiendo ideas y "colándome" en bodas para poder inspiraros en la vuestra, nunca os he hablado sobre la mía propia: hace hoy tres años, con Carlos. 

Qué duda cabe que para mi fue la boda más bonita del mundo, pero eso es algo subjetivo y al fin y al cabo, todas las novias dirán lo mismo...supongo.

Pero no sólo fue la boda más maravillosa sino también la culpable de este mundo que ahora me rodea: Momentips, pues a pesar de llevar más de 8 años organizando eventos - infantiles - el mundo de las bodas me empezó a atraer desde que comencé con los preparativos de la mía... y la que hoy os cuento, ¡con todo lujo de detalles!

Organizar mi propia boda fue para mi el mayor reto de mi trabajo. Me casaba en Burgos, mi ciudad natal, pero vivía en Madrid por lo que debía estar yendo y viniendo continuamente y eso hacia que las cosas se complicaran un poco. Menos mal que mi madre se armó de paciencia para "hacerme todos los recados" y todo aquéllo que no tuviera que ver directamente con la ceremonia o el banquete lo encargué en Madrid.

Lo primero en lo que pensé fue en el vestido. Lo tenía muy claro desde el principio, tanto el estilo como el diseñador: Jorge Vázquez. 

Jorge acertó de pleno conmigo, pues captó la idea que tenía desde el primer momento: un vestido ligero, joven, con el que sentirme delicada, especial, y por supuesto guapa, pues todas queremos sentirnos así el día de nuestra boda. Quería también algún detalle en cristal/plata y las aplicaciones que utiliza Jorge Vázquez son una maravilla. 

Si me dejáis daros un consejo, elegid el traje de novia en función de vuestro estilo. Más que nunca ese día tenéis que ser vosotras mismas. 

Las joyas, unos preciosos pendientes de Yanes  de brillantes, aguamarinas, turmalinas rosas y perlas que me regaló la madre de Carlos. Me encantaron, porque no son los convencionales de una novia; También llevé los dos anillos  que me regaló Carlos: el de compromiso, un brillante solitario y platino y otro, muy especial para mí, de diminutos brillantes engarzados.

El ramo me lo hizo Jícara, no tengo palabras para describir lo bonito que era...

Mi madre también confió en Jorge Vázquez para su vestido, de color azul marino, que combinó con peep toe de pitón en color plata y clutch a juego, ambos de Jimmy Choo. ¡Elegantísima y guapísima! Ambas elegimos  los mismos zapatos, sólo que los míos fueron de la colección nupcial, en color marfil.

Carlos estaba impecable con un chaqué gris de Boldrini y corbata de Armani, y su madre y madrina iba espectacular con un diseño de Juana Martín, en color turquesa y mantilla negra

La ceremonia se celebró en el Monasterio San Pedro Cardeña, un enclave maravilloso y rodeado de naturaleza. Siempre me han gustado las margaritas y la decoración sencilla, así que decoramos la entrada a la Iglesia recreando un bonito pasillo con una alfombra gris y seis grandes macetas repletas de margaritas. La decoración floral corrió a cargo de Cultura de Flor, también la del interior. 

El banquete se celebró en el hotel Landa Palace de Burgos. 

¿Me acompañáis en la celebración? Os lo cuento en el siguiente post.

Todas las fotos son de Macarena Olivares, la fotógrafa que elegimos para ese día, hizo un trabajo estupendo