Menos mal que a estas horas los casi 400 invitados a la boda religiosa de Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo en Gstaad ya están volviendo a sus casas, después de los tres días de celebraciones que nos morimos por ver.
Sólo pedimos una fotito por favor...
Sólo pedimos una fotito por favor...
La primera ausente: Charlene de Mónaco, osease, la mujer de Alberto de Mónaco, una ausencia inexplicable que nadie entiende, como casi todo lo que ocurre en el Principado...Al parecer tenía una agencia oficial de lo más ocupada y eso le ha impedido acudir a la boda del año: la de su sobrino.
Segunda ausencia: Gad Elmaleh. Ésta estaba algo más cantada, pero aún así nos ha sorprendido mucho no ver (bueno ver ver no hemos visto nada...) a la pareja de Carlota Casiraghi, quien fue acompañada por su tío al enlace, el otro "soltero". Mientras, el actor humorista estaba actuando en París. Quien sí ha estado durante los tres días de fiesta ha sido su ex novio, Alex Dellal, quien lejos de reconquistarla acudió con su novia y madre de su primer hijo. Álex Dellal, otro heredero archimillonario como todos los amigos de los Casiraghi, fue el eterno novio de Carlota junto con la que formaba una pareja súper chic. Lástima que lo cambiara por el actor francés...otra de las cosas inexplicaes del Palacio monegasco... Pero así es la vida: que te sorprende muchas veces.
Seguimos con las ausencias destacadas: Estefanía de Mónaco, hermana de Carolina y tía del novio, que prefirió celebrar su cumpleaños en el circo que acudir a la boda más famosa del año. Vamos que no desperdiciamos nosotros esa invitación ni por todo el oro del mundo....
Ernesto de Hannover no acudió no sabemos si porque estaba de resaca como en otras bodas reales o porque no le invitaron. El caso es que el ex de Carolina no se dejó ver por la estación suiza.
Quienes no faltaron a la boda alpina fueron los únicos normales de la familia (por ahora): Pierre Casiraghi y su novia, Beatrice Borromeo, quien acaba de perder a su padrastro...
Se ha tratado sin duda de una boda totalmente blindada a los medios, y muy pocas cosas han trascendido del enlace, salvo algún detalle del vestido de Tatiana: un diseño de Valentino invernal y con capucha.
También se supo que la etiqueta de la mega fiesta que tuvo lugar el viernes, a la que muchos de los invitados llegaron directamente esquiando, fue "après ski de los años 60". Se organizó una sensacional "Fiesta Foundeé" en el exclusivo The Eagle Ski Club (imagen que os enseñamos). La boda ha terminado hoy con un brunch imaginamos que de alto postín, aunque seguro que no le tiene nada que envidiar al brunch que os proponíamos hacer en este post: "cómo organizar un brunch perfecto".
Os mantendremos informadas de todo lo que vayamos conociendo, y si queréis ir abriendo boda y no lo leísteis, os dejamos con la boda civil del 31 de agosto y que os contábamos of course. "La boda hippy chic de Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo"
¡¡Feliz semana!!
¡¡Feliz semana!!
2 comentarios :
Esta familia siempre hace cosas raras cuando llegan eventos importantes jejeje
Hola Marina!!
Muchas gracias por leernos y por tu comentario.
Así es, tienes razón que la familia Casiraghi es algo extraña en ese sentido...pero a nosotras nos encanta porque nos dan mucho juego a la hora de escribir ;)
Un abrazo!!
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